Condenamos enérgicamente el ataque de un dron ruso contra un autobús en Bilopillia, provincia de Sumi, que ha causado la muerte a al menos 9 personas y herido a otras 7.
Este ataque, y otros llevados a cabo en las últimas horas, son la macabra respuesta de Rusia a la oferta de un alto fuego completo por parte de Ucrania, y dejan claro que no quiere la paz.
El gobierno y el pueblo de Ucrania merecen todo nuestro apoyo y solidaridad.