El Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación concluye la firma de tres nuevos Marcos de Asociación con República Dominicana, Paraguay y Honduras. Estos acuerdos se producen en el marco del proceso de reforma de la política española de cooperación para el desarrollo sostenible y “consolidan una cooperación eficaz, participativa y alineada con las prioridades nacionales de los países socios”, como indica José Manuel Albares, ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación.
Estos Marcos de Asociación, que orientan la actuación de la cooperación española en los países para los próximos años, representan un paso clave en la implementación de la Ley 1/2023 de Cooperación para el Desarrollo Sostenible y la Solidaridad Global y del Plan Director de la Cooperación Española 2024-2027.
Alineamiento con prioridades nacionales
Cada uno de estos acuerdos ha sido el resultado de un amplio proceso de diálogo y construcción conjunta con las autoridades nacionales e instituciones a todos los niveles, sociedad civil y organismos internacionales, así como con los actores del sistema de cooperación español, incluyendo la Administración General del Estado, gobiernos autonómicos y locales, universidades, sociedad civil y sector privado.
Los Marcos de Asociación están alineados con las prioridades nacionales de los países socios y se articulan en torno a las tres transiciones definidas en el Plan Director: transición social, ecológica y económica. Además, integran los enfoques transversales de derechos humanos, enfoque feminista y de género, lucha contra la pobreza y las desigualdades, justicia climática y sostenibilidad ambiental, diversidad cultural y construcción de paz.
Desarrollo sostenible adaptado a cada país
En el caso de Honduras, el acuerdo se centra en dos grandes resultados de desarrollo, enfocados en la reducción de la pobreza extrema y en el fomento del acceso a medios de vida sostenibles y resilientes, abordando aspectos clave como la desnutrición infantil, la educación, el empleo digno, el acceso a servicios básicos, el agua, la salud, el impulso a las infraestructuras sociales y productivas y la cultura de paz.
El acuerdo con República Dominicana se enfoca en el fortalecimiento del Estado de derecho y la protección de los derechos humanos. También se prioriza la mejora de las condiciones laborales, así como el acceso a una educación técnico-profesional de calidad, inclusiva y con enfoque de género; y la gestión sostenible del territorio, con énfasis en el acceso universal al agua y al saneamiento, la resiliencia climática y la preservación de los ecosistemas.
En Paraguay, el Marco de Asociación se enfoca en avanzar hacia una igualdad real y efectiva, eliminando la discriminación y violencia hacia mujeres y niñas. Se promueve la sostenibilidad ambiental de los sistemas productivos, con énfasis en la innovación y el impulso a las cadenas de valor, especialmente en áreas rurales y vulnerables. También se potencia la resiliencia al cambio climático, mejorando la planificación y los servicios públicos en ciudades y territorios, y en el fortalecimiento del Estado de derecho y el respeto a los derechos humanos y la diversidad cultural.
Compromiso con la Agenda 2030
En palabras del ministro, “estos nuevos acuerdos no solo profundizan en las relaciones bilaterales, sino que también refuerzan el compromiso de España con la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible, a través de una cooperación basada en la confianza mutua, la solidaridad y el principio de no dejar a nadie atrás”. “En este sentido, se busca una cooperación transformadora, alineada con los retos globales y centrada en las personas”, indica Albares.
Tras la publicación del Plan Director de la Cooperación Española 2024-2027, el año pasado se adoptaron también nuevos Marcos de Asociación para el Desarrollo Sostenible con Perú, Ecuador y Filipinas.
Asimismo, actualmente se está avanzando en la elaboración de los Marcos de Asociación con Senegal, Colombia y Guatemala y en breve iniciará también el proceso con Jordania, continuando así “el despliegue de una cooperación renovada, más articulada y adaptada a las necesidades y retos de los países socios”.