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Madrid reclama ser patrimonio de la UNESCO

Pocos dudan en España que Madrid tiene un “valor universal excepcional” y ahora han pedido a la UNESCO que lo reconozca nivel internacional.

25 de julio de 2019
El primer paso ya está dado. Las 3 administraciones públicas de Madrid –Ayuntamiento, Comunidad y Estado- están de acuerdo en que la Capital debe ser reconocida como Patrimonio Mundial y, conjuntamente, han presentado una candidatura ante la UNESCO para que reconozca, a nivel internacional en la categoría de “Paisaje Cultural”, el valor de la zona urbana enmarcada entre el  Paseo del Prado y el Parque del Retiro.
 
La decisión se tomará a mediados del 2020, pero los argumentos de la candidatura son  inmejorables: 200 hectáreas de terreno, de las que el 75 por ciento son espacios verdes de gran valor histórico y extraordinaria belleza - como el propio Parque del Retiro o el Real Jardín Botánico-, que atesoran una concentración excepcional y heterogénea de edificios singulares.
 
Recorriendo el poco más de un kilómetro que tiene el Paseo del Prado nos  encontramos con el palacio de Cibeles, sede del ayuntamiento de la Capital; la Casa de América; el Cuartel General del Ejército de Tierra, en el Palacio de Buenavista; el Banco de España; el Palacio de Villahermosa, sede del Museo Thyssen-Bornemisza; el Congreso de los Diputados; los hoteles Palace y Ritz; el Museo del Prado; el Real Jardín Botánico; o el edificio Sabatini, donde está el museo Reina Sofía.
 
Y si nos adentramos en el barrio de los Jerónimos, en dirección al Retiro, pasaremos junto a los magníficos edificios que acogen la Bolsa, el Museo de la Armada, el Ministerio de Agricultura, el Museo Nacional de Antropología, la Iglesia de los Jerónimos o la Real Academia Española.
 
Sin olvidar monumentos tan conocidos y emblemáticos de Madrid como la Puerta de Alcalá, las fuentes de Cibeles, Apolo y Neptuno o el monumento a Alfonso XII, en el estanque del Retiro.
 
Pero, junto a su indudable valor paisajístico y arquitectónico, la zona propuesta aporta, según Carmen Rojas, coordinadora del Área de Cultura y Deportes del Ayuntamiento de Madrid, “valores ciudadanos. Es el lugar elegido por los madrileños, desde el siglo XVI, para pasear y disfrutar sin distinción de clases sociales”. Una elección que fue potenciada por el impulso urbanístico que Carlos III dio al Paseo del Prado. Lo convirtió, resalta Rojas, “en uno de los primeros paseos arbolados que se hicieron en Europa y su diseño ha sido replicado en muchos países latinoamericanos, como Cuba, Perú o México, en las que nos encontramos con alamedas similares”. Además, el rey Borbón apostó por introducir la Ciencia en el Paseo del Prado construyendo el Gabinete de Ciencias Naturales, que hoy acoge el Museo del Prado, el Jardín Botánico o el Observatorio de Astronomía. Edificios que actuaron como imán para que otras instituciones del Estado y de la Iglesia se ubicaran también en la misma.
 
Hoy, el Paseo del Prado es una de las zonas más emblemáticas y simbólicas de toda España, el lugar donde ciudadanos de todo el territorio celebran sus manifestaciones por lo bueno y malo que ocurre en el país. Por eso, según Rojas, “esta no es solo una candidatura madrileña, es una candidatura muy española.
 
Fue muy emociónate comprobar, cuando el Estado hizo suya la propuesta, como otras comunidades autónomas manifestaron que este “trocito” de Madrid también era algo suyo, una zona con la que se sentían identificadas”.
 
Artículo de J.A García Brunete publicado en la revista del Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social, Carta de España Se abre en ventana nuevanº 758 - Mayo 2019.