Los delitos relacionados con el tráfico de drogas son considerados de mucha importancia por las autoridades turcas. Dependen del Tribunal de la Seguridad del Estado, que igualmente trata asuntos de terrorismo.
Turquía presenta en general bajos índices de criminalidad. No obstante lo cual deben adoptarse las precauciones elementales de sentido común que el viajero aplica en su lugar de origen. En las zonas más turísticas de Estambul se aconseja conducirse con prudencia y prestar especial atención a las pertenencias que se lleven en todo momento.
No hay restricciones aduaneras en lo que respecta a efectos personales, ropa, medicinas, libros y revistas. Lógicamente está estrictamente prohibida la importación de narcóticos, y la importación de armas requiere un permiso especial (incluidas navajas grandes y cuchillos de monte).
Puede traerse a Turquía joyería de uso personal y no comercial hecha de metales preciosos y gemas cuyo valor no exceda de 15.000 dólares norteamericanos. La joyería que exceda esta valoración podrá entrarse en Turquía siempre que se declare en el momento de la entrada o se pruebe que se compró en el mercado turco.
Está prohibido exportar objetos muebles culturales (objetos encontrados sobre o bajo tierra o bajo el agua, de la prehistoria o de tiempos históricos, de valor científico, cultural, religioso o artístico) u objetos muebles naturales (objetos de valor que datan de las edades geológicas, prehistóricas o históricas, encontrados sobre o bajo tierra o bajo el agua, que, debido a su rareza, especial característica o belleza, deben ser preservados) así como antigüedades.
Las autoridades turcas vigilan de forma muy estricta la salida del país de objetos que puedan entrar dentro de una de estas categorías (en ocasiones aplican un criterio muy amplio, incluyendo dentro de estas categorías objetos y antigüedades aparentemente de escaso valor o interpretando la noción de antigüedad de una manera muy flexible). Además de la confiscación de los objetos, las autoridades pueden detener provisionalmente a aquellos que intenten cometer un delito de exportación, obligarles a permanecer en el país hasta la comparecencia ante la justicia y obligarles a pagar fianzas muy elevadas. Las penas pueden oscilar entre 5 y 10 años de reclusión. Estas recomendaciones se aplican igualmente a los objetos que puedan hallarse en el mar haciendo submarinismo o piedras y otros restos que se encuentren en yacimientos arqueológicos. En caso de duda, se recomienda consultar a las autoridades locales antes de iniciar el viaje de regreso.
En la compra de alfombras, es necesario solicitar la factura para presentar en la aduana, y para la exportación de alfombras antiguas es necesario presentar la factura y una licencia de exportación que se puede obtener en cualquiera de los museos dependientes del Ministerio de Cultura y en algunos puestos aduaneros.
En cuanto a los alimentos que tengan la condición de souvenir, se puede traer hasta cinco kilos de productos animales enlatados, comida animal enlatada y alimentos procesados como carne curada. Pueden traerse hasta tres kilos de frutas o verduras frescas o secadas siempre que se traigan para consumo, y hasta un kilo de otros productos vegetales. La importación de otros productos o de estos productos en cantidad superior tendrá la consideración de importación comercial.
En cuanto a la importación de medicamentos, pueden viajarse con una cantidad de medicamentos para uso personal que sea razonable en relación al período de estancia en Turquía, para lo que necesitará declararse en la Oficina de Aduanas acompañado de documentación justificativa (receta médica, etc.).
No se considera legal que los pacientes que reciben tratamiento de metadona lo lleven consigo en sus viajes a Turquía, ya que la práctica del suministro de este fármaco en el tratamiento de los pacientes con dependencia de sustancias psicoactivas no está vigente en Turquía.
En caso de viajar acompañado de animales de compañía al país debe tenerse en cuenta que sólo se permite la entrada de perros, gatos y pájaros y es necesaria la presentación de un informe veterinario sobre la salud del animal, certificado de origen y vacunación, tarjeta de identidad y pasaporte de animal de compañía si se dispone del mismo. En relación a esta cuestión, se recomienda en todo caso contactar con la Embajada de Turquía en Madrid o con el Consulado General de Turquía en Barcelona.
En los últimos años, algunas autoridades locales han prohibido o restringido de forma indefinida o temporal la realización de actividades relacionadas con el colectivo LGTBI (manifestaciones, actividades culturales…). Por ello, resulta conveniente informarse, antes de participar en dichas actividades, acerca de la situación concreta en el lugar de celebración.
También son registrados en el pasaporte los vehículos (coches, motos, caravanas, etc.) que entran en Turquía por un período no superior a tres meses, ya que en este último caso es necesario un tríptico o carnet de passage. El viajero debe asegurarse de que el sello de registro del vehículo se estampe en el pasaporte del titular del vehículo, y no en el de alguno de los acompañantes.
Las señales de carretera siguen la normativa internacional de señalización viaria. El código viario es equiparable al de los países europeos. Los vehículos con matrícula extranjera solo podrán permanecer en Turquía durante tres meses. En caso de que se tenga intención de sobrepasar dicho periodo, hay que contactar con las autoridades turcas para proceder al registro del vehículo. Las multas se pagan en el momento. Existen numerosas estaciones de combustible. Es conveniente verificar el estado del vehículo que se alquila. Existen centros de asistencia en carretera Türkiye Turing ve Otomobil Kurumu (teléfono: 212 2828140). En caso de accidente, no debe moverse el vehículo y hay que llamar a la Policía de Tráfico (número 112) que efectuará el parte de accidente. Conviene solicitar una copia del atestado.
Para cumplir con el requisito de seguro, los vehículos con matrícula española que vayan a entrar en el territorio turco por un puesto fronterizo terrestre, pueden elegir entre las siguientes 2 opciones:
- Contratar un seguro (Carta Verde) antes de salir de España. La Carta Verde (también conocida como la Carta Internacional de los seguros de vehículos de motor) es un documento de seguro suscrito por todos los seguros de un país determinado que acredita que el vehículo está asegurado en países que figuran en el propio documento y que han firmado un acuerdo específico. Debe su nombre a ser impreso en papel verde;
- Contratar un seguro de daños a terceros en la frontera que cubra la totalidad de la estancia en Turquía.
En caso de que se vayan a realizar desplazamientos por carretera por el interior del país se debe extremar la prudencia, estando desaconsejado conducir de noche. Las condiciones de las carreteras no son siempre buenas y la conducción es en algunos casos temeraria.
El permiso de conducir español es suficiente para aquellos ciudadanos españoles que estén en Turquía de turismo. Sin embargo, aquellos ciudadanos españoles que residan en Turquía, necesitarán además una traducción de dicho permiso, legalizada por notario o por la propia embajada.
De conformidad con lo dispuesto en la Ley de transporte por carretera, no se permitirá la entrada en territorio turco a vehículos de pasajeros (turismos, autobuses, minibuses, etc.) que tengan una antigüedad superior a 20 años. Quedan excluidos del ámbito de aplicación de esta ley los acuerdos suscritos por Turquía con terceros países sobre esta materia en concreto, así como los vehículos propiedad de turistas y vehículos con matrícula privada que entren en Turquía sólo para un día.
Las condiciones del transporte público varían enormemente entre las diferentes localidades turcas. No obstante, en Estambul y Ankara constituyen, tanto el metro como los autobuses públicos, un medio de transporte seguro y barato con las salvedades ya realizadas en materia de riesgo terrorista. En Turquía son habituales los “dolmuş”, pequeños autobuses que ofrecen servicios de transporte público pero de titularidad privada, cuya red de servicio y frecuencia es mayor, por lo que resultan muy prácticos, pero cuya seguridad está sujeta al grado de prudencia o temeridad de cada conductor.
En el caso de llevar a cabo actividades de riesgo (submarinismo, viajes en globo, parapente, escalada, actividades relacionadas con el mundo del motor, actividades náuticas de cualquier clase, etc.) es conveniente informarse sobre si el clausulado de la póliza suscrita en España cubre tales actividades o bien es necesario contratar un seguro adicional para tales actividades.
En caso de viajar sin seguro, o con uno que no cubra tales actividades, los gastos de hospitalización, tratamiento médico y eventual evacuación a España han de ser asumidos por el paciente y pueden llegar a ser muy elevados.
En Turquía no se practican incineraciones, por lo tanto, es conveniente que el seguro médico cubra, en caso de fallecimiento del asegurado, o bien la repatriación o bien la inhumación de los restos mortales.
En ciertas zonas protegidas o en la proximidad de ubicaciones militares, policiales y puestos fronterizos está estrictamente prohibido tomar fotografías o filmar. Incluso en caso de que no se indique explícitamente, ante la duda, en este tipo de entorno o similares, el viajero debe abstenerse de tomar fotografías o vídeos. Esto es particularmente importante en las regiones fronterizas de Turquía, en particular en la frontera con Siria y en la de Irak. Se recomienda extremar la precaución en estos lugares. En todo caso, es absolutamente necesario seguir las indicaciones de las fuerzas de seguridad turcas.